¡Optimiza el tráfico vial! Implementa acciones que puedan mejorar el flujo vehicular y descubre que dispositivos viales pueden ayudar.
¡Optimiza el tráfico vial! Implementa acciones que puedan mejorar el flujo vehicular y descubre que dispositivos viales pueden ayudar.
Liliana Alcántara
22 de enero de 2025
El tráfico es una situación que afecta la vida cotidiana de muchas personas, generando que recorridos cotidianos se conviertan en tediosos y duraderos. Este problema no solo impacta negativamente a la vida de los conductores, también representa un problema de tránsito sobre un país. Los congestionamientos vehiculares no son solo un número, existen otras afectaciones y pueden ser mejoradas poco a poco con planes estratégicos sostenibles a corto y largo plazo.
La Ciudad de México es una de las más habitadas, de acuerdo al informe de TomTom, los automovilistas pierden en promedio 152 horas al año en congestiones durante las horas pico. Considerando que el tráfico ralentiza a diferentes tipos de vehículos, como el transporte público, hay otros impactos negativos. Durante los embotellamientos, los automovilistas generan cantidades significativas de dióxido de carbono, lo que representa un problema a la economía de un país y al medio ambiente.
Al iniciar un plan de movilidad, se deben tener en cuenta la optimización de los semáforos inteligentes que adapten los tiempos según el flujo vehicular en tiempo real, teniendo en cuenta al transporte público, los vehículos particulares y el flujo peatonal. Mejorar el uso de carriles exclusivos e implementar medidas en caso de obstrucción por terceros, además de mejorar la señalización vial clara y visible.
Estos dispositivos se utilizan durante situaciones que pueden afectar el tráfico vial de forma temporal, tales como eventos especiales, obras viales de corta duración, accidentes sobre las vías, emergencias o incluso los cierres de calles.
La movilidad no se mejora utilizando y mejorando los dispositivos viales, también requiere una inversión en la adaptación del transporte público para que sea más eficiente y accesible para todos, así como fomentar el uso de otros vehículos de transporte para incentivar una movilidad más sostenible. Además, es necesario entender si las vías pueden soportar su capacidad del tráfico vehicular.